COVA TALLADA

En esta ruta se recorre el Cabo de San Antonio, perteneciente al Parque Natural del Montgó, en el que se encuentran, además del faro en el extremo del Cap de Sant Antoni, varias cuevas a nivel de la costa, entre los acantilados. Siendo la más conocida y visitada la Cova Tallada.

pincha aquí versión para imprimir

pincha aquí versión satélite WIKILOC

...
Mapa ruta nº 119 Cova Tallada

...
Descripción de la ruta

Se inicia la ruta junto al Santuario de Ntra. Sra. De Los Ángeles, en la zona conocida como Les Planes.
Se trata de una finca cerrada por una tapia donde se encuentra el antiguo Monasterio de los Jerónimos, fundado en 1374 pero con un aspecto renovado, ya que fue totalmente restaurado en los años 60.
Junto a él existe un cruce de caminos por donde pasa la PR-CV 355 y de la cual se verán las marcas blancas-amarillas en varias ocasiones durante el transcurso de esta ruta, ya que coincide bastante. Se inicia la ruta hacia el Oeste, en dirección al Macizo del Montgó.

Al poco de caminar por el camino asfaltado, se encuentra a la derecha una entrada a un camino de tierra por donde gira la PR-CV 355 en dirección a la Cova Tallada. Pero como en esta ocasión se quiere pasar primero por la Torre del Gerro, hay que continuar recto por el camino asfaltado.

Más adelante se encuentra otro camino de tierra a la derecha llamado Camí de la Cova Talla. Se sigue por él sin ningún problema y finalmente se deja al llegar a una casa en ruinas, tras la cual empieza una senda bien balizada.

Como se ve en el mapa, la senda lleva, cruzando la Plana de la Torre, hasta la Torre del Gerro.
Se trata de una torre vigía construida a mediados del siglo XVI, que junto con otras, tenían el objetivo de vigilar una amplia zona costera del posible ataque berberisco, cosa bastante habitual en esa época.
Su nombre viene de la forma de jarro que tiene su estructura, aunque también se le conoce como Torre de l‘Aiguadolç, por la existencia muy cerca de un manantial de agua dulce que desagua en el mar.

Imagen de la Torre del Gerro.

Tras la visita a la torre se inicia el descenso por un camino de cemento primero y asfaltado después.

Al llegar a una curva cerrada a la izquierda, donde existen varios carteles informativos, hay que seguir al frente.

El camino de tierra que sale de la misma curva se encuentra cerrado por una barrera que impide el paso tan solo a los vehículos. Se sigue descendiendo suavemente por el camino de tierra hasta llegar a un mirador, donde existe una escalera de cemento que baja hasta una senda, por donde se continúa.

Vista atrás hacia la Torre del Gerro tras cruzar el primer barranco siguiendo la senda.

Se trata de una senda no muy complicada pero en ocasiones incomoda de recorrer, por la inclinación de las rocas sobre las que se camina.
También resulta entretenida al adentrarse bajo los pequeños grupos de pinos y palmito que pueblan esta ladera.

Al llegar al Barranc de la Cova Tallada ya está muy cerca la pequeña entrada a dicha cueva.
En esta imagen se intuye frente a la roca que sobresale del agua, pegada al acantilado.

Prácticamente siguiendo el cauce del barranco se encuentra una bajada, acondicionada con una cuerda para asegurarse. Una vez sobre al acantilado, hay que dirigirse hacia la derecha hasta encontrar la pequeña entrada.
Es un tramo un poco complicado y resbaladizo, y en caso de mucho oleaje, puede resultar peligroso.

Una vez sobrepasada la estrecha entrada, la cueva se abre en una enorme sala con varias partes.
Una primera de gran altura, abierta al mar por una boca casi tan grande como la misma sala, por lo que está suficientemente iluminada y con una base más alta que el suelo de la cueva, por lo que en condiciones normales no entra el agua del mar. También hay en el suelo rocas de gran tamaño fruto de desprendimientos del techo.
En una siguiente sala, parte de ella creada artificialmente e inundada, se encuentran cuatro pequeñas aperturas situadas a nivel del mar. Es evidente que las dos más pequeñas son artificiales, creadas por la mano del hombre y las otras dos, algo más altas, aun teniendo un aspecto más natural, tienen huellas de haber sido modificadas manualmente. Su pequeño tamaño también limita mucho la entrada de luz, por lo que esta parte de la cueva se encuentra sumida permanentemente en penumbras.
En esta zona inundada son visibles, tanto en las paredes como en el suelo, las huellas de la extracción de bloques de piedra para la construcción del Castillo de Denia y otras casas señoriales.

Al fondo de la cueva se encuentran varias pequeñas cavidades y puentes naturales.

Cerca de la entrada existe una pequeña sala, con el techo abierto, en el que también existen huellas visibles del trabajo de los canteros.

Imagen al exterior desde la pequeña sala por la entrada al mar que la inunda y por donde se realizaría el transporte de los bloques de piedra en barca por la costa, ya que por tierra el acceso a la cueva resulta más complicado.

Vista desde el exterior de la Cova Tallada y del islote que hay frente a ella.
También se puede apreciar una de las entradas más pequeñas y a la derecha se puede ver parte de la gran boca de la sala principal.

Después de la interesante visita, se vuelve a salir por la pequeña entrada y tras subir el pequeño tramo con la cuerda, empieza la larga y única ascensión de esta ruta, por una senda que sigue la ladera de la izquierda de este barranco.

Vista hacia atrás del Barranc de la Cova Tallada.

Saliendo del barranco existe un tramo de roca con algún paso acondicionado con una cadena para asegurarse, aunque tampoco es muy necesaria para avanzar.

Una vez arriba, el sendero se hace claramente visible entre el monte bajo que cubre la Plana de la Torre.

Finalmente el sendero enlaza con una pista forestal por la que se prosigue.

Un poco más adelante, la pista forestal se encierra entre un ancho muro de piedras a la derecha y otro auténtico muro de vegetación a la izquierda.

Como se ve en el mapa, es el momento de buscar el principio de otro sendero, no muy visible al empezar sobre un pequeño montículo.
Más adelante el sendero está bastante marcado y tiene algunas bifurcaciones, pero hay que seguir la que se dirige hacia la izquierda de un grupo de casas. El sendero termina en otra pista forestal, junto a unas ruinas.

A continuación se prosigue hacia la izquierda un pequeño tramo, para posteriormente seguir por la pista forestal que gira a la derecha.

La pista forestal recorre una amplia zona cubierta de un pinar de gran tamaño.

Finalmente se llega a un Área Recreativa, donde se encuentra una fuente, que en verano viene muy bien para refrescarse.
La pista forestal enlaza en este punto con el camino asfaltado que llega hasta el Faro de San Antonio. Pero se puede evitar salir al asfalto, al menos durante un tramo, al coger una senda que se inicia a la izquierda de la curva del camino de la segunda imagen.

Andando por el camino asfaltado, a través del Barranc del Tangó, se distingue parte del puerto de Jávea y de la senda que lo enlaza con el faro.

Desde lo alto del Cap de Sant Antoni, mirando hacia el Sur-Oeste se tienen estas vistas de la Bahía de Jávea.

El camino termina en un mirador sobre el Cap de Sant Antoni, desde donde también se ve el Far de Sant Antoni y las edificaciones que lo acompañan.

Ahora ya solo quedan unos 25 minutos (algo más de 2 Km.) de un tanto monótono paseo por el camino asfaltado hasta el Santuari de la Mare de Déu dels Àngels y el punto de partida.









Ruta de 11,25 Km en 260' el 22/08/2011