¿QUIEN FUE JAUME “EL BARBUT”?
Jaume “el Barbut ” (1783-1824) fue un bandolero Crevillentino nacido en una modesta familia de campesinos, por lo que ya desde muy joven tiene que encargarse de pastorear rebaños de ovejas por las sierras circundantes.
Harto de las ovejas se emplea en Catral como guarda de unas viñas. Ya casado y con dos hijos acontece el hecho que cambiará su vida para siempre. Un peligroso bandido de la zona apodado “el Zurdo”, entra a robar en la finca de la que es guardián y se enfrenta a él. Como resultado de la reyerta, “el Zurdo” muere de un trabucazo en el pecho. Sabedor de que los hombres de “el Zurdo” intentaran matarlo y muy receloso de la justicia, ya que aunque fue una muerte en defensa propia, ni el mismo dueño de las viñas, alcalde de Catral, piensa declarar en su defensa, pone a salvo a su familia en casa de su cuñada en Orihuela y se esconde en los montes que tan bien conoce de su época de pastor.
Acuciado por el hambre, se une a una importante banda de bandoleros capitaneados por los “Hermanos Mojicas”, iniciando así su vida de asaltos y delitos varios. Pero no está de acuerdo con algunos métodos muy crueles de los hermanos y con el apoyo de algunos miembros de la partida, se enfrenta violentamente a ellos y se hace con el control de la banda. Desde entonces su principal objetivo es robar a los más pudientes y repartir parte de los botines conseguidos con los más pobres de su importante zona de influencia, cosa que le garantiza la simpatía y el respeto del pueblo llano.
Coincidiendo con la invasión napoleónica, compagina su variada carrera delictiva con un importante enfrentamiento a las tropas francesas, que son incapaces de hacer nada contra él, ya que gracias a su inteligencia, una intrincada red de contactos y su perfecto conocimiento del terreno, hace imposible detenerle.
Tras la definitiva expulsión de los franceses de España, Jaume ya es conocido a nivel nacional y por supuesto se trata del bandolero valenciano más importante.
En la convulsa situación política de principios del siglo XIX, pasa varias veces de héroe indultado a villano con un importante precio a su cabeza, ya que se decanta activamente por la monarquía.
Viendo que es imposible apresarlo en la sierra como bandolero y tratándose de un aliado del rey muy molesto, se urde una sutil traición y definitivamente en 1824 es apresado en Murcia.
Finalmente Jaime José Cayetano Alfonso, más conocido como “el Barbudo”, muere colgado en la plaza de Santo Domingo de Murcia. Por la importancia del reo y como escarmiento ejemplar, su cuerpo es descuartizado, enterrando tan solo el tronco. Cabeza, manos y pies son fritos para evitar su descomposición. Como no es del todo inhabitual en esa época, estos miembros son expuestos, dentro de una jaula de hierro, en lugares visibles de la comarca, yendo a parar la cabeza a Crevillente. +INFO
SIMA DE JAUME “EL BARBUT”
Situada en la genéricamente llamada Serra de Crevillent, esta sima se encuentra dentro del término municipal de Albatera, aunque muy cerca del linde con Hondón de los Frailes.
Para visitar la sima, aquí se muestran dos rutas distintas.
La primera recorre la zona del Monte Alto, tratándose de una ruta no excesivamente exigente a nivel físico, pero sí bastante complicada en el tema técnico, ya que como se verá más adelante, en la descripción de la ruta, hay que realizar un par de destrepes bastante difíciles y peligrosos, por lo menos para un simple senderista.
En cambio la segunda ruta es un paseo bastante sencillo, en el que se recorre la zona de Sant Gaietá, con algo de desnivel pero asumible por la gran mayoría.
Actualmente el emplazamiento de la entrada a la sima de Jaume “el Barbut” es visible desde muy lejos por la existencia de una pequeña explanada creada con escombros sacados de la sima, ya que como se ve una vez dentro, en ella se han realizado una serie de trabajos para acondicionarla y facilitar su recorrido.
Entrada a la sima.
La primera parte de la sima es una grieta formada entre dos placas de roca que se unen en un casi invisible vértice en lo alto.
A los pocos metros la oscuridad lo envuelve todo y es necesaria la utilización de linternas.
Hasta ahora no existe ningún peligro, ya que apenas hay desnivel del suelo y la anchura y altura de este único túnel es lo suficiente para circular sin ningún problema. Es probable que en algún punto del recorrido, se hayan picado las paredes para facilitar el paso.
Tras recorrer 25 metros se llega a una zona más complicada, ya que el desnivel se acentúa bastante, pero si se anda con cuidado tampoco pasa nada, ya que existe un cable de acero que sirve de apoyo.
Todo el empinado descenso se realiza sobre una serie de escalones construidos con piedras y argamasa.
Todo este trabajo debió tener un objetivo importante, ya que supuso un esfuerzo considerable.
Después de recorrer algo más de 25 metros, finalmente se llega a un punto en el que termina el cable de acero y en el suelo aparece un agujero que desciende totalmente vertical. Sobre este se encuentra un tronco que en otros tiempos se utilizaría para algún tipo de trabajo en el fondo del pozo o incluso para descender por él.
En un lateral de la roca se encuentran varios tipos de anclajes más modernos para asegurar reuniones y descender realizando rápel.
Detalle del tronco.
Como se ve en la imagen, el pozo es bastante profundo, unos 16 metros y por supuesto, este último tramo de escalones hay que bajarlo con extremo cuidado, ya que un resbalón puede resultar fatal.
La sima termina en el fondo de este pozo, ya que no existe ninguna galería lateral.
Aunque no hay marcas visibles, también es posible que en épocas de abundantes lluvias, el pozo acumulase agua y se convirtiese en un lugar de donde abastecerse.
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pincha aquí versión satélite WIKILOC de la ruta nº 137
pincha aquí versión satélite WIKILOC de la ruta nº 138
Jaume “el Barbut ” (1783-1824) fue un bandolero Crevillentino nacido en una modesta familia de campesinos, por lo que ya desde muy joven tiene que encargarse de pastorear rebaños de ovejas por las sierras circundantes.
Harto de las ovejas se emplea en Catral como guarda de unas viñas. Ya casado y con dos hijos acontece el hecho que cambiará su vida para siempre. Un peligroso bandido de la zona apodado “el Zurdo”, entra a robar en la finca de la que es guardián y se enfrenta a él. Como resultado de la reyerta, “el Zurdo” muere de un trabucazo en el pecho. Sabedor de que los hombres de “el Zurdo” intentaran matarlo y muy receloso de la justicia, ya que aunque fue una muerte en defensa propia, ni el mismo dueño de las viñas, alcalde de Catral, piensa declarar en su defensa, pone a salvo a su familia en casa de su cuñada en Orihuela y se esconde en los montes que tan bien conoce de su época de pastor.
Acuciado por el hambre, se une a una importante banda de bandoleros capitaneados por los “Hermanos Mojicas”, iniciando así su vida de asaltos y delitos varios. Pero no está de acuerdo con algunos métodos muy crueles de los hermanos y con el apoyo de algunos miembros de la partida, se enfrenta violentamente a ellos y se hace con el control de la banda. Desde entonces su principal objetivo es robar a los más pudientes y repartir parte de los botines conseguidos con los más pobres de su importante zona de influencia, cosa que le garantiza la simpatía y el respeto del pueblo llano.
Coincidiendo con la invasión napoleónica, compagina su variada carrera delictiva con un importante enfrentamiento a las tropas francesas, que son incapaces de hacer nada contra él, ya que gracias a su inteligencia, una intrincada red de contactos y su perfecto conocimiento del terreno, hace imposible detenerle.
Tras la definitiva expulsión de los franceses de España, Jaume ya es conocido a nivel nacional y por supuesto se trata del bandolero valenciano más importante.
En la convulsa situación política de principios del siglo XIX, pasa varias veces de héroe indultado a villano con un importante precio a su cabeza, ya que se decanta activamente por la monarquía.
Viendo que es imposible apresarlo en la sierra como bandolero y tratándose de un aliado del rey muy molesto, se urde una sutil traición y definitivamente en 1824 es apresado en Murcia.
Finalmente Jaime José Cayetano Alfonso, más conocido como “el Barbudo”, muere colgado en la plaza de Santo Domingo de Murcia. Por la importancia del reo y como escarmiento ejemplar, su cuerpo es descuartizado, enterrando tan solo el tronco. Cabeza, manos y pies son fritos para evitar su descomposición. Como no es del todo inhabitual en esa época, estos miembros son expuestos, dentro de una jaula de hierro, en lugares visibles de la comarca, yendo a parar la cabeza a Crevillente. +INFO
SIMA DE JAUME “EL BARBUT”
Situada en la genéricamente llamada Serra de Crevillent, esta sima se encuentra dentro del término municipal de Albatera, aunque muy cerca del linde con Hondón de los Frailes.
Para visitar la sima, aquí se muestran dos rutas distintas.
La primera recorre la zona del Monte Alto, tratándose de una ruta no excesivamente exigente a nivel físico, pero sí bastante complicada en el tema técnico, ya que como se verá más adelante, en la descripción de la ruta, hay que realizar un par de destrepes bastante difíciles y peligrosos, por lo menos para un simple senderista.
En cambio la segunda ruta es un paseo bastante sencillo, en el que se recorre la zona de Sant Gaietá, con algo de desnivel pero asumible por la gran mayoría.
Actualmente el emplazamiento de la entrada a la sima de Jaume “el Barbut” es visible desde muy lejos por la existencia de una pequeña explanada creada con escombros sacados de la sima, ya que como se ve una vez dentro, en ella se han realizado una serie de trabajos para acondicionarla y facilitar su recorrido.
Entrada a la sima.
La primera parte de la sima es una grieta formada entre dos placas de roca que se unen en un casi invisible vértice en lo alto.
A los pocos metros la oscuridad lo envuelve todo y es necesaria la utilización de linternas.
Hasta ahora no existe ningún peligro, ya que apenas hay desnivel del suelo y la anchura y altura de este único túnel es lo suficiente para circular sin ningún problema. Es probable que en algún punto del recorrido, se hayan picado las paredes para facilitar el paso.
Tras recorrer 25 metros se llega a una zona más complicada, ya que el desnivel se acentúa bastante, pero si se anda con cuidado tampoco pasa nada, ya que existe un cable de acero que sirve de apoyo.
Todo el empinado descenso se realiza sobre una serie de escalones construidos con piedras y argamasa.
Todo este trabajo debió tener un objetivo importante, ya que supuso un esfuerzo considerable.
Después de recorrer algo más de 25 metros, finalmente se llega a un punto en el que termina el cable de acero y en el suelo aparece un agujero que desciende totalmente vertical. Sobre este se encuentra un tronco que en otros tiempos se utilizaría para algún tipo de trabajo en el fondo del pozo o incluso para descender por él.
En un lateral de la roca se encuentran varios tipos de anclajes más modernos para asegurar reuniones y descender realizando rápel.
Detalle del tronco.
Como se ve en la imagen, el pozo es bastante profundo, unos 16 metros y por supuesto, este último tramo de escalones hay que bajarlo con extremo cuidado, ya que un resbalón puede resultar fatal.
La sima termina en el fondo de este pozo, ya que no existe ninguna galería lateral.
Aunque no hay marcas visibles, también es posible que en épocas de abundantes lluvias, el pozo acumulase agua y se convirtiese en un lugar de donde abastecerse.
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pincha aquí versión satélite WIKILOC de la ruta nº 137
pincha aquí versión satélite WIKILOC de la ruta nº 138
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Mapa ruta nº 137 Sima de Jaume "el Barbut" por Monte Alto
Mapa ruta nº 138 Sima de Jaume "el Barbut" por Sant Gaietà
Mapa ruta nº 137 Sima de Jaume "el Barbut" por Monte Alto
Mapa ruta nº 138 Sima de Jaume "el Barbut" por Sant Gaietà
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Descripción de la ruta nº 137 Sima de Jaume "el Barbut" por Monte Alto
Descripción de la ruta nº 137 Sima de Jaume "el Barbut" por Monte Alto
Esta ruta se inicia en el puerto de montaña que forma la carretera entre Albatera y Hondón de los Frailes al cruzar sobre la Serra de Crevillent. En este punto existe una encrucijada de caminos y una pequeña explanada en la que se puede dejar el coche.
Aunque no entra en el recorrido lógico de la ruta, dada la cercanía del Corral del Sastre puede resultar interesante visitarlo, ya que se trata de un corral de ganado con varios siglos de historia, pero con arreglos en los muros más contemporáneos, aunque hace tiempo que no se utiliza.
En un extremo se encuentra situado un aljibe y en el contrario, una casa-cueva bastante grande, con una pequeña ventana abierta al interior del corral.
Como se ve en el mapa, la ruta en sí arranca siguiendo una pista forestal que empieza a subir la Sierra de Albatera desde el mismo punto donde se ha dejado el coche.
Durante la ascensión se cruzan un par de bifurcaciones que se solventarán sin ninguna dificultad siguiendo las indicaciones del mapa. Finalmente la pista forestal termina en una senda por la que se prosigue.
La senda coge la cresta del Mont Alt, bastante redondeada y sin ningún problema durante su recorrido. Un poco antes de llegar a un pequeño collado, hay que desviarse a la derecha en la bifurcación de la senda, para alcanzar la cima más elevada de este monte (682 m.), donde en teoría debería estar el vértice geodésico del Monte Alto nº89274, del que como se ve en la imagen, apenas queda rastro.
Desde aquí arriba se distingue perfectamente la senda que sigue recorriendo toda la cresta hasta llegar a la Cruz del Monte Alto.
Se desciende hasta el pequeño collado y se retorna a la senda principal para continuar la ruta. En algunos puntos la senda deja la cresta y la rodea bien por un lado o por otro.
En el paso de la imagen, aunque no es muy complicado, se ha reforzado la seguridad instalando una cadena metálica.
Las marcas blancas-amarillas que acompañan hasta la cruz, corresponden a una extensión de la PR-CV 180.
Imagen de la Cruz del Monte Alto.
Se trata de una gran cruz de madera, ensamblada con unas pletinas metálicas a una sólida base anclada a este peñasco; además cuatro cables sujetos a la parte superior se encargan de mantener su verticalidad frente a las rachas de viento.
Muy cerca de su base se encuentran clavadas a la roca dos placas conmemorativas.
Imagen de la cruz desde el Sur.
Ahora llega una de las partes complicadas de la ruta, al tener que descender por la brecha en la roca que existe a los pies de la cruz.
Se trata de un estrecho paso que posteriormente se abre un poco pero que desciende bastante vertical durante unos metros.
Hay suficientes puntos de apoyo, aunque algunos están bastante separados y el terreno es algo inestable. Hay que llevar cuidado a la hora de apoyarse y asegurarse, ya que puede que se desprenda alguna roca.
Imagen de la brecha.
Una vez sobrepasado este trance, hay que recorrer un tramo de ladera bastante inclinado, por lo que hay que andar con mucho cuidado. No existe ninguna senda, pero la vegetación no molesta, ya que es escasa en esta cara de la sierra.
Vista desde el Sur de esta impresionante peña sobre la que se alza la Cruz del Monte Alto.
Al llegar al final de la pequeña ladera, se gira a la izquierda y se empieza a descender hacia el Este por el cordal de la sierra.
En un principio es ancho y sin ningún problema en recorrer, ya que la vegetación es pobre y aun sin senda, es muy fácil de seguir. Un poco más adelante va estrechándose, dejando paso a una cresta rocosa sobre la que hay que andar con precaución.
Pero se llega a un punto en el que se encuentra el segundo hándicap importante de esta ruta.
Se trata del final de la cresta, que desciende durante unos metros con un desnivel bastante pronunciado, sobre todo si hay que descenderlo, ya que la sensación de vértigo es muy elevada al estar la cara Sur, cortada por un acantilado.
La roca es bastante sólida y rugosa, por lo que para gente acostumbrada a escalar, no reviste excesiva dificultad este destrepe, pero si no se está habituado a este tipo de trances, puede ser un paso muy comprometido y peligroso.
Imagen de la cresta por la que hay que descender.
Ahora hay que seguir descendiendo campo a través hasta la base de la torre de alta tensión que se ve al fondo de la primera foto.
Como se ve en el mapa, una vez sobrepasada la torre de alta tensión, existe una senda que llega hasta unos bancales, desde donde se prosigue la ruta descendiendo por el camino de acceso.
Unos metros antes de alcanzar la carretera entre Albatera y Hondón de los Frailes, una senda desciende hacia la izquierda para adentrarse en el barranco y cruzar dicha carretera por el túnel.
Una vez en el otro lado, se sigue el cauce del barranco mientras se pueda, principalmente por la parte derecha.
Cuando sea posible, hay que salir por la derecha y continuar sobre el canal que transporta el agua procedente del pozo de Los Suizos.
Al llegar frente a la zona vallada, donde se encuentran las grandes balsas y las infraestructuras de este importante nacimiento de agua, se prosigue por el pequeño barranco que sigue hacia la derecha.
Se sigue por el barranco hasta sobrepasar un pequeño acueducto, justo el momento en el que se distingue perfectamente una senda que lo abandona por la derecha y asciende en busca del cordal de la sierra.
Se sigue la senda sin ningún problema, ya que además de estar perfectamente marcada sobre el terreno, se encuentra balizada con marcas blancas-amarillas, que se vuelve a coincidir con la PR-CV 180.
Se llega a un cruce de sendas, pero se sigue al frente como indica el mapa.
Vista de la cara Sur de la Serra del Picatxo.
La senda es bastante visible normalmente, aunque en algún momento se puede perder el rastro, por lo que hay que ir atentos a las marcas blancas-amarillas.
Por esta misma senda es por la que se desciende durante la ruta nº 138.
Finalmente la senda enlaza con una pista forestal por la que se gira a la derecha.
A los pocos metros se encuentra a la izquierda una entrada que se convierte en senda, está balizada con marcas blancas-amarillas y llega hasta la carretera entre Albatera-Hondón de los Frailes, por lo que está opción se pasa de largo.
Al llegar a una curva cerrada a la derecha de la pista forestal se encuentra una senda sin marcas a la que no se le hace caso. Al otro lado de la curva está el principio de la senda, esta vez sí marcada, por la que se continúa.
Esta senda lleva hasta la entrada de la sima de Jaume “el Barbut”.
Tras la visita a la sima, se prosigue la ruta circulando campo a través, siguiendo la misma cota hasta que finalmente se llega a una senda.
Esta senda enlaza con una pista forestal, por la que se empieza a descender hasta llegar al puerto de montaña donde está el coche.
Ruta de 8,74 Km realizada en 210' el 02/08/2012
Se deja el coche en una pequeña explanada y se inicia la ruta siguiendo el camino de tierra hacia el Oeste.
Se irán encontrando marcas blancas-amarillas, ya que se coincide con la PR-CV 255.
Se pasa junto a bancales de almendros bien cuidados, algunos de ellos sostenidos por grandes muros de piedras.
Toda la cara Norte de la Serra de Crevillent se encuentra cubierta de un manto de pinos.
Una vez sobrepasados los bancales, el camino empieza a descender lentamente y se convierte en una pista forestal un poco menos transitable para vehículos.
Otra vista sobre la cara de la umbría de la Sierra de Crevillente, aunque realmente este trozo se encuentra dentro del término municipal de Albatera.
Finalmente la pista forestal se convierte en un sendero muy fácil de seguir.
Más adelante el sendero se ensancha un poco y sigue el cordal de la sierra, teniendo el término municipal de Hondón de los Frailes a la derecha y el de Albatera a la izquierda.
Vista hacia atrás sobre el brusco declive de la Serra de Crevillent.
El descenso del sendero lleva hacia un collado donde se encuentra el Mirador de Jaime “el Barbudo”.
Imagen del mirador.
Del mirador salen varios caminos, pero hay que continuar por la pista forestal que sigue más a la izquierda.
Un poco más adelante, al principio de una curva a la izquierda, se encuentra la senda que lleva hasta la entrada a la sima de Jaume “el Barbut”.
Una vez realizada la visita, se retorna por la misma senda a la pista forestal que se abandonó y se sigue descendiendo por ella.
Ahora se coincide con el recorrido utilizado en la ruta nº 137.
Ahora hay que ir atentos a la izquierda para localizar el principio del sendero que se debe seguir. Ya que como se ve en el mapa, se encuentra al principio de una curva de la pista forestal a la derecha, marcado con un montón de piedras.
El sendero discurre por la cara Este del barranco, la izquierda según se desciende. No es complicado de seguir ya que es bastante visible, de cualquier forma, en caso de duda hay que ir atentos a las marcas blancas-amarillas correspondientes a la PR-CV 180.
Desde este sendero se tiene una magnífica vista sobre la carretera entre Albatera y Hondón de los Frailes, que cruza esta sierra siguiendo un sinuoso recorrido.
El sendero sigue la ladera hacia la izquierda abandonando el barranco.
Cuando se llega a un cruce de sendas, se rebasa el pequeño barranco que hay a la izquierda y se sigue en dirección al Este.
Aquí termina el tramo coincidente con la ruta nº 137.
Esta nueva senda también se encuentra balizada con marcas blancas-amarillas al ser una variante de la PR-CV 180.
Un poco más adelante se encuentra otra bifurcación de la que sale una senda hacia la derecha, que abandona este barranco y lleva hacia el Paso de las Yeguas. En esta ocasión se sigue por el barranco, en dirección al Parc de Muntanya de Sant Gaietà.
Vista hacia el Norte de la agreste cara de la solana de la Serra del Picatxo.
En varios tramos, la senda discurre por el cauce del barranco y como se ve en la imagen, existe gran diferencia entre la árida vegetación de la cara de la solana a la izquierda y la más poblada cara de la umbría de la Serra Mitjana a la derecha.
El barranco va estrechándose y empiezan a aparecen pequeños bancales formados con muros de piedras.
Imagen del Picatxo por su cara Sur.
Se llega a un gran collado donde la senda se separa en dos. La de la derecha que sube hasta la cima de la Serra Mitjana, y la que hay que seguir hacia la izquierda.
Otra vista del Picatxo.
La senda pasa junto a los escasos restos de una antigua edificación, de la que en cambio se conserva un horno de leña en bastantes buenas condiciones, además de una cueva.
Desde aquí arriba se distingue al fondo la Ermita de San Cayetano, situada en la zona de acampada y recreo de Els Anouers.
La senda va girando hacia la izquierda siguiendo la ladera, hasta llegar a la senda principal por la que se inicia el ascenso hacia el Coll de Sant Gaietà.
Al principio es un tanto caótico, por lo que lo más práctico es seguir las marcas de la PR-CV 110.
Vista hacia el Picatxo durante el ascenso por la senda.
Una vez alcanzado el Collado de San Cayetano, la senda se separa hacia la izquierda en dirección al Picatxo y hacia la derecha hacia la cima del Sant Juri.
Para esta ruta se andan unos cuantos metros hacia la derecha y enseguida aparece una senda que desciende hacia el Norte por la magnífica cara de la umbría.
La senda se bifurca, pero las dos opciones van a parar al mismo punto y finalmente se cierra la ruta por una pista forestal.
Ruta de 6,71 Km realizada en 150' el 08/08/2012
Aunque no entra en el recorrido lógico de la ruta, dada la cercanía del Corral del Sastre puede resultar interesante visitarlo, ya que se trata de un corral de ganado con varios siglos de historia, pero con arreglos en los muros más contemporáneos, aunque hace tiempo que no se utiliza.
En un extremo se encuentra situado un aljibe y en el contrario, una casa-cueva bastante grande, con una pequeña ventana abierta al interior del corral.
Como se ve en el mapa, la ruta en sí arranca siguiendo una pista forestal que empieza a subir la Sierra de Albatera desde el mismo punto donde se ha dejado el coche.
Durante la ascensión se cruzan un par de bifurcaciones que se solventarán sin ninguna dificultad siguiendo las indicaciones del mapa. Finalmente la pista forestal termina en una senda por la que se prosigue.
La senda coge la cresta del Mont Alt, bastante redondeada y sin ningún problema durante su recorrido. Un poco antes de llegar a un pequeño collado, hay que desviarse a la derecha en la bifurcación de la senda, para alcanzar la cima más elevada de este monte (682 m.), donde en teoría debería estar el vértice geodésico del Monte Alto nº89274, del que como se ve en la imagen, apenas queda rastro.
Desde aquí arriba se distingue perfectamente la senda que sigue recorriendo toda la cresta hasta llegar a la Cruz del Monte Alto.
Se desciende hasta el pequeño collado y se retorna a la senda principal para continuar la ruta. En algunos puntos la senda deja la cresta y la rodea bien por un lado o por otro.
En el paso de la imagen, aunque no es muy complicado, se ha reforzado la seguridad instalando una cadena metálica.
Las marcas blancas-amarillas que acompañan hasta la cruz, corresponden a una extensión de la PR-CV 180.
Imagen de la Cruz del Monte Alto.
Se trata de una gran cruz de madera, ensamblada con unas pletinas metálicas a una sólida base anclada a este peñasco; además cuatro cables sujetos a la parte superior se encargan de mantener su verticalidad frente a las rachas de viento.
Muy cerca de su base se encuentran clavadas a la roca dos placas conmemorativas.
Imagen de la cruz desde el Sur.
Ahora llega una de las partes complicadas de la ruta, al tener que descender por la brecha en la roca que existe a los pies de la cruz.
Se trata de un estrecho paso que posteriormente se abre un poco pero que desciende bastante vertical durante unos metros.
Hay suficientes puntos de apoyo, aunque algunos están bastante separados y el terreno es algo inestable. Hay que llevar cuidado a la hora de apoyarse y asegurarse, ya que puede que se desprenda alguna roca.
Imagen de la brecha.
Una vez sobrepasado este trance, hay que recorrer un tramo de ladera bastante inclinado, por lo que hay que andar con mucho cuidado. No existe ninguna senda, pero la vegetación no molesta, ya que es escasa en esta cara de la sierra.
Vista desde el Sur de esta impresionante peña sobre la que se alza la Cruz del Monte Alto.
Al llegar al final de la pequeña ladera, se gira a la izquierda y se empieza a descender hacia el Este por el cordal de la sierra.
En un principio es ancho y sin ningún problema en recorrer, ya que la vegetación es pobre y aun sin senda, es muy fácil de seguir. Un poco más adelante va estrechándose, dejando paso a una cresta rocosa sobre la que hay que andar con precaución.
Pero se llega a un punto en el que se encuentra el segundo hándicap importante de esta ruta.
Se trata del final de la cresta, que desciende durante unos metros con un desnivel bastante pronunciado, sobre todo si hay que descenderlo, ya que la sensación de vértigo es muy elevada al estar la cara Sur, cortada por un acantilado.
La roca es bastante sólida y rugosa, por lo que para gente acostumbrada a escalar, no reviste excesiva dificultad este destrepe, pero si no se está habituado a este tipo de trances, puede ser un paso muy comprometido y peligroso.
Imagen de la cresta por la que hay que descender.
Ahora hay que seguir descendiendo campo a través hasta la base de la torre de alta tensión que se ve al fondo de la primera foto.
Como se ve en el mapa, una vez sobrepasada la torre de alta tensión, existe una senda que llega hasta unos bancales, desde donde se prosigue la ruta descendiendo por el camino de acceso.
Unos metros antes de alcanzar la carretera entre Albatera y Hondón de los Frailes, una senda desciende hacia la izquierda para adentrarse en el barranco y cruzar dicha carretera por el túnel.
Una vez en el otro lado, se sigue el cauce del barranco mientras se pueda, principalmente por la parte derecha.
Cuando sea posible, hay que salir por la derecha y continuar sobre el canal que transporta el agua procedente del pozo de Los Suizos.
Al llegar frente a la zona vallada, donde se encuentran las grandes balsas y las infraestructuras de este importante nacimiento de agua, se prosigue por el pequeño barranco que sigue hacia la derecha.
Se sigue por el barranco hasta sobrepasar un pequeño acueducto, justo el momento en el que se distingue perfectamente una senda que lo abandona por la derecha y asciende en busca del cordal de la sierra.
Se sigue la senda sin ningún problema, ya que además de estar perfectamente marcada sobre el terreno, se encuentra balizada con marcas blancas-amarillas, que se vuelve a coincidir con la PR-CV 180.
Se llega a un cruce de sendas, pero se sigue al frente como indica el mapa.
Vista de la cara Sur de la Serra del Picatxo.
La senda es bastante visible normalmente, aunque en algún momento se puede perder el rastro, por lo que hay que ir atentos a las marcas blancas-amarillas.
Por esta misma senda es por la que se desciende durante la ruta nº 138.
Finalmente la senda enlaza con una pista forestal por la que se gira a la derecha.
A los pocos metros se encuentra a la izquierda una entrada que se convierte en senda, está balizada con marcas blancas-amarillas y llega hasta la carretera entre Albatera-Hondón de los Frailes, por lo que está opción se pasa de largo.
Al llegar a una curva cerrada a la derecha de la pista forestal se encuentra una senda sin marcas a la que no se le hace caso. Al otro lado de la curva está el principio de la senda, esta vez sí marcada, por la que se continúa.
Esta senda lleva hasta la entrada de la sima de Jaume “el Barbut”.
Tras la visita a la sima, se prosigue la ruta circulando campo a través, siguiendo la misma cota hasta que finalmente se llega a una senda.
Esta senda enlaza con una pista forestal, por la que se empieza a descender hasta llegar al puerto de montaña donde está el coche.
Ruta de 8,74 Km realizada en 210' el 02/08/2012
Se deja el coche en una pequeña explanada y se inicia la ruta siguiendo el camino de tierra hacia el Oeste.
Se irán encontrando marcas blancas-amarillas, ya que se coincide con la PR-CV 255.
Se pasa junto a bancales de almendros bien cuidados, algunos de ellos sostenidos por grandes muros de piedras.
Toda la cara Norte de la Serra de Crevillent se encuentra cubierta de un manto de pinos.
Una vez sobrepasados los bancales, el camino empieza a descender lentamente y se convierte en una pista forestal un poco menos transitable para vehículos.
Otra vista sobre la cara de la umbría de la Sierra de Crevillente, aunque realmente este trozo se encuentra dentro del término municipal de Albatera.
Finalmente la pista forestal se convierte en un sendero muy fácil de seguir.
Más adelante el sendero se ensancha un poco y sigue el cordal de la sierra, teniendo el término municipal de Hondón de los Frailes a la derecha y el de Albatera a la izquierda.
Vista hacia atrás sobre el brusco declive de la Serra de Crevillent.
El descenso del sendero lleva hacia un collado donde se encuentra el Mirador de Jaime “el Barbudo”.
Imagen del mirador.
Del mirador salen varios caminos, pero hay que continuar por la pista forestal que sigue más a la izquierda.
Un poco más adelante, al principio de una curva a la izquierda, se encuentra la senda que lleva hasta la entrada a la sima de Jaume “el Barbut”.
Una vez realizada la visita, se retorna por la misma senda a la pista forestal que se abandonó y se sigue descendiendo por ella.
Ahora se coincide con el recorrido utilizado en la ruta nº 137.
Ahora hay que ir atentos a la izquierda para localizar el principio del sendero que se debe seguir. Ya que como se ve en el mapa, se encuentra al principio de una curva de la pista forestal a la derecha, marcado con un montón de piedras.
El sendero discurre por la cara Este del barranco, la izquierda según se desciende. No es complicado de seguir ya que es bastante visible, de cualquier forma, en caso de duda hay que ir atentos a las marcas blancas-amarillas correspondientes a la PR-CV 180.
Desde este sendero se tiene una magnífica vista sobre la carretera entre Albatera y Hondón de los Frailes, que cruza esta sierra siguiendo un sinuoso recorrido.
El sendero sigue la ladera hacia la izquierda abandonando el barranco.
Cuando se llega a un cruce de sendas, se rebasa el pequeño barranco que hay a la izquierda y se sigue en dirección al Este.
Aquí termina el tramo coincidente con la ruta nº 137.
Esta nueva senda también se encuentra balizada con marcas blancas-amarillas al ser una variante de la PR-CV 180.
Un poco más adelante se encuentra otra bifurcación de la que sale una senda hacia la derecha, que abandona este barranco y lleva hacia el Paso de las Yeguas. En esta ocasión se sigue por el barranco, en dirección al Parc de Muntanya de Sant Gaietà.
Vista hacia el Norte de la agreste cara de la solana de la Serra del Picatxo.
En varios tramos, la senda discurre por el cauce del barranco y como se ve en la imagen, existe gran diferencia entre la árida vegetación de la cara de la solana a la izquierda y la más poblada cara de la umbría de la Serra Mitjana a la derecha.
El barranco va estrechándose y empiezan a aparecen pequeños bancales formados con muros de piedras.
Imagen del Picatxo por su cara Sur.
Se llega a un gran collado donde la senda se separa en dos. La de la derecha que sube hasta la cima de la Serra Mitjana, y la que hay que seguir hacia la izquierda.
Otra vista del Picatxo.
La senda pasa junto a los escasos restos de una antigua edificación, de la que en cambio se conserva un horno de leña en bastantes buenas condiciones, además de una cueva.
Desde aquí arriba se distingue al fondo la Ermita de San Cayetano, situada en la zona de acampada y recreo de Els Anouers.
La senda va girando hacia la izquierda siguiendo la ladera, hasta llegar a la senda principal por la que se inicia el ascenso hacia el Coll de Sant Gaietà.
Al principio es un tanto caótico, por lo que lo más práctico es seguir las marcas de la PR-CV 110.
Vista hacia el Picatxo durante el ascenso por la senda.
Una vez alcanzado el Collado de San Cayetano, la senda se separa hacia la izquierda en dirección al Picatxo y hacia la derecha hacia la cima del Sant Juri.
Para esta ruta se andan unos cuantos metros hacia la derecha y enseguida aparece una senda que desciende hacia el Norte por la magnífica cara de la umbría.
La senda se bifurca, pero las dos opciones van a parar al mismo punto y finalmente se cierra la ruta por una pista forestal.
Ruta de 6,71 Km realizada en 150' el 08/08/2012