SERRA DE TOIX - EL MASCARAT

El principal objetivo de esta ruta es recorrer la cara Sur de la Serra de Toix, lo más cerca posible de los acantilados que cortan esta sierra contra el mar.

Se encuentra situada al Sur del término municipal de Calpe y sobresale de tierra firme hacia el mar con el conocido como Morro de Toix, rompiendo la línea de la costa y dejando la bahía de Calpe al Norte y la de Altea al Sur.

Imagen desde el mirador sobre los acantilados de la Serra de Toix, que forman una esquina casi perfecta sobre la Cala El Collao o Racó del Corb.

La Serra de Toix es la prolongación natural de la Serra de Bèrnia hasta el mar, aunque quedan separadas por el Barranc Salat, formando un impresionante desfiladero llamado Cañón del Mascarat.

Aunque su visita no entraría en el recorrido lógico de la ruta, es una lástima no acercarse hasta él para conocerlo.



Toda esta zona de unión entre la Serra de Bèrnia y la Serra de Toix recibe el nombre de El Mascarat (El Enmascarado).

Durante los siglos XVIII, XIX y principios del XX, al igual que en otras zonas montañosas de la provincia, existieron una serie de bandoleros que conocedores del terreno, utilizaron la gran cantidad de cuevas y recovecos para huir de la justicia. Algunos de ellos, como Jaumeel Barbut en la mitad Occidental de la provincia de Alicante o “el Mascarat” en las comarcas de La Marina, alcanzaron gran renombre entre la gente humilde por su afición a robar a los más ricos y repartir parte de las ganancias entre los más necesitados.

En esta ocasión no está tan documentado históricamente como en el caso de “el Barbut” y es más bien la leyenda popular la que cuenta que un misterioso enmascarado se dedicó durante algunos años a desvalijar viajeros por los caminos de estas montañas. Según parece se trataba de un joven de buena posición, natural del Vall de Laguar, alegre y muy querido por sus vecinos.
Al parecer, aunque nadie se enteró, enfermó de lepra y una gran depresión le hizo huir de todo y “echarse al monte” como medio de subsistencia, siendo su capucha no solo un medio para ocultar su identidad, sino un modo de disimular las terribles marcas dejadas en su rostro por la enfermedad.
El final de las correrías del enmascarado terminaron con la aparición del cadáver de un hombre totalmente cubierto, cerca de la casa del joven desaparecido. Al quitarle la capucha, los vecinos lo reconocieron a pesar de tener el rostro desfigurado.

pincha aquí versión para imprimir

pincha aquí versión satélite WIKILOC

...
Mapa ruta nº 139 Serra de Toix - El Mascarat

...
Descripción de la ruta

Para iniciar esta ruta, hay que dirigirse a la zona de El Mascarat, en la costa fronteriza entre los términos municipales de Altea y Calpe.
En el punto indicado en el mapa, existe una urbanización con una amplia zona de aparcamiento público.
Con el fin de visitar el Cañón del Mascarat, se retrocede por la carretera de acceso a las urbanizaciones.

Al cruzar sobre el Barranc Salat, se abandona la carretera por la parte izquierda del barranco y se desciende al cauce por el muro inclinado que encauza el agua hacia el puente.
Ya desde aquí se ven los puentes que cruzan el desfiladero.

El fondo del barranco está cubierto de grandes piedras y el tránsito por él no reviste ninguna dificultad.
Cuanto más cerca, más impresiona este estrecho cañón, cortado por dos interminables paredes verticales, donde los escaladores tienen un auténtico paraíso con infinidad de vías.
El puente que aparece en primer plano es una impresionante obra de ingeniería, construido con sillares de piedra y que alcanza una altura superior a los 60 metros, con la que por fin se consiguió unir estas dos caras rocosas, que durante siglos impidió el fluido tránsito de personas y mercancías entre las comarcas de la Marina Baja y la Marina Alta.
En segundo plano se distingue el puente doble de hormigón construido para la carretera N332 en 1967, ya que este anterior, de finales del siglo XIX, quedo demasiado estrecho para el tráfico actual.
Y al fondo el viaducto metálico construido en 1915 por el que cruza la línea férrea Alacant-Dénia (Trenet de la Marina).
Entre el segundo y el primero es habitual la práctica del puenting.

Vista de los tres puentes.

El barranco va estrechándose hasta tener que circular entre dos enormes paredes verticales con apenas un metro de separación en algunos puntos.
Sobre el suelo de arena se encuentran algunas piedras, relativamente pequeñas, que han caído fruto de desprendimientos de las laderas, ya que algunas de mayor tamaño, han quedado atascadas en lo alto, entre las dos paredes.

Un poco más adelante, las paredes terminan por juntarse, cerrando el paso, ya que se forma un gran salto por el que es imposible subir sin el material adecuado.
Este es el fin del recorrido, ahora toca regresar.
Es impresionante pensar que por este estrecho desfiladero pasa toda el agua sobrante en caso de lluvias torrenciales al Norte de la Serra de Bèrnia.

Vista durante la salida.

Se regresa por el mismo camino hasta llegar a la zona de aparcamiento y desde aquí se inicia la ruta hacia la Serra de Toix.

Se sube por la carretera como indica el mapa, aunque no hay problema, ya que hay varias calles que llegan al mismo punto.

Desde aquí se tiene otra vista del Canyó del Mascarat.

La carretera termina y hay que proseguir por una senda que llega hasta el collado, donde se enlaza con un camino de tierra.
A la izquierda se distingue sobre la montaña los escasos restos del Castell de Calp.
Para esta ruta se sigue unos metros por el camino de tierra hacia la derecha, pero pronto se convierte en un sendero que llega hasta una calle asfaltada de una urbanización, por la que se sigue hacia la derecha.

Vista hacia la también impresionante pared que corta hacia el Norte la cima de la Serra de Toix.

La urbanización termina y se continúa por un sendero que va descendiendo lentamente.

Desde aquí se tienen una magníficas vistas sobre El Mascarat.

El sendero llega sobre los acantilados de la Serra de Toix, donde su rastro se pierde bastante, por lo que hay que andar por donde se pueda hasta que se llega a un barranco.

Una vez en el barranco hay que ir hacia la parte baja, ya que al subir la ladera Oriental, hay que ir atentos ya que la senda vuelve a ser visible y pasa junto a un grupo de paleras.
Desde este punto ya no hay ningún problema para seguirla.

Imagen de la zona sobre los acantilados hacia el frente.

Se llega a un pequeño mirador desde donde se tiene una magnífica vista sobre los acantilados.

Junto al mirador hay una abertura en el suelo, por la que se ve el mar, ya que es un vuelo rocoso sobre el acantilado. ¿el Forat de l'Ase?.

La senda discurre entre la vegetación que cubre esta ladera sobre los acantilados y se acerca a una pequeña caseta.

De la caseta salen un par de mangueras que descienden, ancladas a la roca del acantilado, hasta más abajo del nivel del agua.

Es frecuente el paso de embarcaciones, kayaks o motos de agua disfrutando desde el mar del impresionante aspecto de estos acantilados y de las cuevas y recovecos formados en él. También es una zona muy visitada por buceadores.
Al fondo se distinguen una especie de jaulas redondas flotando en el mar.

Se trata de una piscifactoría compuesta por una docena de jaulas donde se crían, aparentemente de una manera bastante natural, peces para el consumo humano.
Aunque hay algunas voces que ponen muchas objeciones a este tipo de granja marina, ya que el hacinamiento de individuos, también provoca contaminación y expansión de plagas, por lo que en algunos puntos de la costa se encuentran bastante cuestionadas.

La senda llega hasta este punto, ¿el Forat de l’Ase?, donde se encuentra la bajada a una de las varias “peixquera” abandonadas que existen en estos acantilados.
Se trataba de una base cubierta de cañizo situada a pocos metros del nivel del mar, a la que normalmente solo se puede acceder descendiendo el acantilado con ayuda de una serie de tramos de escalera metálica, estacas y sogas. Prácticamente es lo que en la actualidad se conoce como vía ferrata.
Como se puede imaginar, se trata de un método de pesca muy complicado y peligroso, por lo que solo se entiende su utilización, como último recurso de gente que no tenía otro medio de subsistencia en una época muy difícil, principios del siglo XX.

Un poco más adelante termina esta ladera inclinada y es imposible continuar.
Desde aquí no es visible, pero cerca, frente a la embarcación con buceadores, se encuentra la Cova dels Coloms, de donde sale bajo el nivel del mar, un río subterráneo de agua dulce, en ocasiones con un caudal importante.
En otros puntos de estos acantilados, también bajo el nivel del mar, existen varias oquedades por las que también sale un cierto caudal de agua dulce.
Según parece, existe una cierta conexión subterránea entre alguna cueva subacuática de Toix y la cueva de la Cala del Moraig, a 20 Kilómetros de distancia.

Ahora para continuar la ruta hay que retroceder por el mismo sendero hasta llegar frente a la primera depresión de la ladera. Como se ve en la imagen, existe más arriba una pared vertical de roca que cortaría el paso.
Aquí se acabaron las sendas, a partir de ahora hay que ir buscando el mejor trazado para ir subiendo hacia la derecha, con el objetivo de llegar hasta el punto donde acaba la pared.

Una vez se alcanza este punto, hay que seguir hacia la derecha siguiendo prácticamente la misma línea de cota.
Todo este tramo desde la senda hasta la cumbre no reviste mucha dificultad ni técnica ni física, lo que es evidente que hay que estar acostumbrado a circular campo a través.

Al llegar a un punto en el que se distinguen unas pedreras, hay que subir hasta la superior, donde resalta un coche, un Renault 12 que lleva algunos años “aparcado” aquí, junto al que hay que pasar.

Se continúa sin apenas subir y se llega a este paso que se ve perfectamente que es el más adecuado para proseguir sin mucha dificultad.
A partir de aquí ya se puede empezar a subir, siguiendo el camino que se vea más sencillo y seguro, aunque en esta travesía no se tiene porque sobrepasar ningún punto peligroso.

Vista hacia atrás una vez sobrepasado.

Otro vehículo “aparcado”.

Una vez alcanzado el final de la sierra, sobre el Morro de Toix, ya hay que subir directo hacia la cumbre.

Se llega a un pequeño muro que delimita un mirador, creado en el extremo Sur-Oriental de la Serra del Toix aprovechando la curva del camino de acceso a las antenas que se encuentran un poco más arriba.

Imagen hacia Calpe desde el mirador.

Ahora toca un pequeño tramo de relax por este camino de tierra, protegido sobre la ladera con un pasamanos de madera, hasta el punto donde se salta con parapente.
Al sobrepasar las antenas, hay que subir directamente hacia la cresta de la sierra.

Una vez sobre la cresta, como es evidente hay que dirigirse hacia la cumbre, bien sobre esta o si se ve muy peligroso, un poco más abajo por la ladera Sur, por la izquierda.

Una vez en la cumbre, se tienen unas magníficas vistas de toda esta espectacular zona.
Al Oeste toda la Bahía de Altea y el extremo Norte de la Serra Gelada; en un primer plano El Mascarat y tras él, la impresionante Serra de Bèrnia, casi siempre cubierta de nubes.

Al Nord-Este se distingue la Serra d’Oltà, mucho más pequeña pero una auténtica maravilla para recorrer.

Y al Este, la Bahía de Calpe, con el Peñón de Ifach al fondo y toda la costa cubierta completamente de urbanizaciones.

No se puede seguir al frente, por lo que para seguir la ruta hay que regresar, pero no hace falta llegar hasta las antenas, ya que cuando sea posible se desciende un poco por la ladera Sur, hasta conectar con una serie de sendas que corren por aquí.
Hay que procurar seguir la que está marcada, pero de todos modos tampoco pasa nada, ya que todas llegan al mismo punto, un descenso bastante inclinado, pero con cuidado no tiene porque ser peligroso.

Vista durante el descenso.

Hay que ir atentos durante el descenso, ya que cuando la bajada se convierte en una pedrera, es fácil pasarse de largo la senda.
Se trata de la misma que se recorrió anteriormente y que ahora se utiliza para regresar, siguiendo el mismo camino andado al principio de la ruta.

Hasta llegar al coche.

Imagen de la cumbre de la Serra de Toix desde el punto de inicio de la ruta.


Ruta de 8,99 Km realizada en 240' el 11/09/2012