La Serra de la Fontanella es una estrecha franja montañosa que en varias ocasiones sobrepasa los 1000 metros de altura y discurre desde Biar, en dirección Nord-Este, hasta Banyeres de Mariola. Forma con la Serra del Reconco y la Serra d’Onil un conjunto montañoso de gran belleza, al estar prácticamente toda su superficie cubierta especialmente de pinos, aunque también existen zonas donde destacan importantes grupos de encinas, además del más variado monte-bajo. Todo ello salpicado por extensos campos de cultivo de cereal, entrelazados por infinidad de pistas forestales y sendas que hacen infinitas las posibilidades de recorrerla.
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Se puede dejar el coche en una pequeña zona despejada, junto al vallado que rodea la Casa de Marco.
Se inicia la ruta por el camino de tierra que corre junto a la valla, hasta que esta gira a la derecha para seguir rodeando los terrenos colindantes a la casa.
La ruta prosigue al frente por el mismo camino, ahora por entre el pinar.
Más adelante se circula junto a unos inmensos bancales de almendros.
Se llega a un punto en el que el camino de tierra se bifurca hacia derecha e izquierda. Como es lógico, se gira a la izquierda, en dirección a la montaña.
Al llegar junto a un pequeño depósito enterrado que recoge agua de lluvia, el camino de tierra desaparece para convertirse en una senda y adentrarse en el bosque.
La senda empieza a subir por la derecha del barranco, cada vez menos marcada.
Llega un momento en el que la senda desaparece como tal, y hay que seguir subiendo por donde se vea más claro y despejado de vegetación.
Se llega a un punto de referencia en el que un conjunto rocoso impide seguir junto al barranco y hay que superarlo por la derecha.
Aunque no hay senda, existe algo parecido creado por el paso de animales, que ayuda a seguir el trazado más adecuado para evitar la vegetación.
Se llega a otro promontorio rocoso y despejado que permite ver la ladera.
Desde este punto aparece algo parecido a un sendero que lleva hacia la izquierda.
Si todo ha ido bien, se llega a una pequeña explanada artificial.
Este “mirador” ofrece unas magníficas vistas.
La senda continúa un poco más, adentrándose en la zona boscosa superior.
Pero desaparece al llegar a una zona despejada de pinos.
A partir de aquí, hay que seguir ascendiendo por donde se quiera, hacia la izquierda de una peña rocosa que se ve en la cumbre.
Llegando al cordal de la sierra hay algo más de vegetación, pero sorteándola no hay mayor problema.
La subida hasta aquí no presenta ninguna dificultad técnica destacable, ni ningún tramo que revista peligro. Pero se puede considerar difícil si la realizan personas no acostumbradas a circular campo a través, en una ladera cubierta de vegetación como esta.
Una vez sobre el cordal, se sigue ascendiendo hacia la cima.
Después de una pequeña trepada, se llega a la cima del Cabeç Gros (1063 m.).
Como se ve en esta imagen hacia el Norte, esta elevación montañosa tiene otra cima prácticamente gemela a esta, pero sin nombre propio y según algunas mediciones, unas decenas de centímetros más elevada.
Un poco a la derecha, al fondo se distingue el próximo objetivo de esta ruta, la Penya de la Blasca.
La ruta continúa bajando unos metros hacia el Este, para luego seguir hacia el Norte en busca de este paso que permite alcanzar el collado entre las dos cumbres.
A partir de aquí, ya se circula por senderos o por pistas forestales, por lo que ya desaparecen los problemas de orientación, en cambio son tantas las posibilidades de variación en el trazado de un recorrido por esta amplia zona, que hay que ir muy atentos al mapa para seguir adecuadamente el descrito en esta ruta.
El sendero recorre todo el collado y al empezar a subir hacia la segunda cima, se bifurca y se abandona la ascensión, para iniciar la bajada hacia la derecha hasta una pista forestal.
Una vez en ella se sigue hacia la derecha, para girar a la izquierda en el primer cruce.
Por este trazado se encontraran marcas blancas-amarillas de la PRV-55.
Al llegar al siguiente cruce, se prosigue al frente, aunque las marcas indiquen fuera de la PRV-55, realmente también continúa por aquí.
Al poco aparece una cadena que corta el paso a los vehículos, ya que se entra en los terrenos de la finca de l’Altet.
El camino de tierra se acerca a la parte posterior de la gran Casa de l’Altet.
Se pasa tras ella y se continúa por la parte superior de los bancales.
Como se ve en el mapa, tras pasar junto a una caseta derruida, a la mitad de los bancales aparece a la derecha el enlace con un camino de tierra que desciende entre ellos. Se gira por él y se pasa junto al Pou de l’Altet.
Después de sobrepasar algunos cruces de caminos, se llega a un tramo donde a la derecha aparece el vallado de otra gran finca.
En estas amplias zonas boscosas se encuentra vegetación de lo más variada, destacando entre los pinos de gran tamaño, la presencia de encinas, algunas de un porte considerable.
Ahora se llega a otra amplia extensión de bancales pertenecientes a otra gran finca, junto a cuya casa se acerca el camino de tierra.
Imagen hacia la zona abancalada.
Se llega frente a la Casa de Carrícola o Mas de la Serrana.
Si no se molesta, como se ve en el mapa, se puede atajar para acceder a la pista forestal superior por un sendero que empieza en la explanada frontal de la casa.
En este sector, despejado de pinos, dominan las encinas como especie arbórea.
En la siguiente bifurcación se sigue por la derecha, ahora junto al vallado de la finca de El Cossi.
Como se ve en el mapa, se gira a la izquierda al llegar a una bifurcación.
Este cambio de dirección supone el inicio de la ascensión a la Penya de la Blasca.
Se sigue por la pista forestal cada vez más degradada. Primero suavemente, para luego ir aumentando el desnivel, sin llegar a ser muy duro.
La pista forestal termina al llegar a la cresta de la sierra, a partir de entonces de sigue por un sendero.
Se llega a una primera cumbre de 1118 metros, desde donde se divisa la siguiente cima de la Penya de la Blasca.
Este es el Vértice Geodésico de La Blasca (1120 m.), donde también se llega en el transcurso de la ruta nº 10.
Tras la visita se inicia el regreso volviendo por el mismo sendero hasta enlazar con la pista forestal. Al llegar a la bifurcación termina la coincidencia con la ida, al seguir por la opción de la derecha.
Alcanzado un cruce se gira a la derecha, descendiendo por una pista encementada que baja por la ladera izquierda del Barranc de Sanxet.
Al otro lado, en la ladera de la derecha se alzan una serie de acantilados que forman las llamadas Penyes del Barranc de Sanxet.
En estas paredes es habitual la práctica de la escalada.
Ya casi llegando al cauce del barranco, empieza a la izquierda una pista forestal que se adentra en la magnífica Ombria de la Carbonera, siguiendo el cauce de otro barranco.
La pista forestal va ascendiendo rodeada de un impresionante bosque, pasa junto a los restos de un antiguo horno de cal y al coincidir con el cauce del barranco, termina. A partir de aquí empieza una subida bastante inclinada por un sendero que enlaza con otra pista forestal.
Una vez en ella, se inicia el definitivo descenso hasta el punto de partida.
Última imagen hacia el Barranc de Sanxet.
La pista forestal va descendiendo entre la extensa pinada, hasta que alcanza los bancales de olivos, ya muy cerca del coche aparcado.
Ruta de 14,28 Km realizada en 260' el 25/11/2014
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Mapa ruta nº 187 Serra de la Fontanella
Mapa ruta nº 187 Serra de la Fontanella
Se puede dejar el coche en una pequeña zona despejada, junto al vallado que rodea la Casa de Marco.
Se inicia la ruta por el camino de tierra que corre junto a la valla, hasta que esta gira a la derecha para seguir rodeando los terrenos colindantes a la casa.
La ruta prosigue al frente por el mismo camino, ahora por entre el pinar.
Más adelante se circula junto a unos inmensos bancales de almendros.
Se llega a un punto en el que el camino de tierra se bifurca hacia derecha e izquierda. Como es lógico, se gira a la izquierda, en dirección a la montaña.
Al llegar junto a un pequeño depósito enterrado que recoge agua de lluvia, el camino de tierra desaparece para convertirse en una senda y adentrarse en el bosque.
La senda empieza a subir por la derecha del barranco, cada vez menos marcada.
Llega un momento en el que la senda desaparece como tal, y hay que seguir subiendo por donde se vea más claro y despejado de vegetación.
Se llega a un punto de referencia en el que un conjunto rocoso impide seguir junto al barranco y hay que superarlo por la derecha.
Aunque no hay senda, existe algo parecido creado por el paso de animales, que ayuda a seguir el trazado más adecuado para evitar la vegetación.
Se llega a otro promontorio rocoso y despejado que permite ver la ladera.
Desde este punto aparece algo parecido a un sendero que lleva hacia la izquierda.
Si todo ha ido bien, se llega a una pequeña explanada artificial.
Este “mirador” ofrece unas magníficas vistas.
La senda continúa un poco más, adentrándose en la zona boscosa superior.
Pero desaparece al llegar a una zona despejada de pinos.
A partir de aquí, hay que seguir ascendiendo por donde se quiera, hacia la izquierda de una peña rocosa que se ve en la cumbre.
Llegando al cordal de la sierra hay algo más de vegetación, pero sorteándola no hay mayor problema.
La subida hasta aquí no presenta ninguna dificultad técnica destacable, ni ningún tramo que revista peligro. Pero se puede considerar difícil si la realizan personas no acostumbradas a circular campo a través, en una ladera cubierta de vegetación como esta.
Una vez sobre el cordal, se sigue ascendiendo hacia la cima.
Después de una pequeña trepada, se llega a la cima del Cabeç Gros (1063 m.).
Como se ve en esta imagen hacia el Norte, esta elevación montañosa tiene otra cima prácticamente gemela a esta, pero sin nombre propio y según algunas mediciones, unas decenas de centímetros más elevada.
Un poco a la derecha, al fondo se distingue el próximo objetivo de esta ruta, la Penya de la Blasca.
La ruta continúa bajando unos metros hacia el Este, para luego seguir hacia el Norte en busca de este paso que permite alcanzar el collado entre las dos cumbres.
A partir de aquí, ya se circula por senderos o por pistas forestales, por lo que ya desaparecen los problemas de orientación, en cambio son tantas las posibilidades de variación en el trazado de un recorrido por esta amplia zona, que hay que ir muy atentos al mapa para seguir adecuadamente el descrito en esta ruta.
El sendero recorre todo el collado y al empezar a subir hacia la segunda cima, se bifurca y se abandona la ascensión, para iniciar la bajada hacia la derecha hasta una pista forestal.
Una vez en ella se sigue hacia la derecha, para girar a la izquierda en el primer cruce.
Por este trazado se encontraran marcas blancas-amarillas de la PRV-55.
Al llegar al siguiente cruce, se prosigue al frente, aunque las marcas indiquen fuera de la PRV-55, realmente también continúa por aquí.
Al poco aparece una cadena que corta el paso a los vehículos, ya que se entra en los terrenos de la finca de l’Altet.
El camino de tierra se acerca a la parte posterior de la gran Casa de l’Altet.
Se pasa tras ella y se continúa por la parte superior de los bancales.
Como se ve en el mapa, tras pasar junto a una caseta derruida, a la mitad de los bancales aparece a la derecha el enlace con un camino de tierra que desciende entre ellos. Se gira por él y se pasa junto al Pou de l’Altet.
Después de sobrepasar algunos cruces de caminos, se llega a un tramo donde a la derecha aparece el vallado de otra gran finca.
En estas amplias zonas boscosas se encuentra vegetación de lo más variada, destacando entre los pinos de gran tamaño, la presencia de encinas, algunas de un porte considerable.
Ahora se llega a otra amplia extensión de bancales pertenecientes a otra gran finca, junto a cuya casa se acerca el camino de tierra.
Imagen hacia la zona abancalada.
Se llega frente a la Casa de Carrícola o Mas de la Serrana.
Si no se molesta, como se ve en el mapa, se puede atajar para acceder a la pista forestal superior por un sendero que empieza en la explanada frontal de la casa.
En este sector, despejado de pinos, dominan las encinas como especie arbórea.
En la siguiente bifurcación se sigue por la derecha, ahora junto al vallado de la finca de El Cossi.
Como se ve en el mapa, se gira a la izquierda al llegar a una bifurcación.
Este cambio de dirección supone el inicio de la ascensión a la Penya de la Blasca.
Se sigue por la pista forestal cada vez más degradada. Primero suavemente, para luego ir aumentando el desnivel, sin llegar a ser muy duro.
La pista forestal termina al llegar a la cresta de la sierra, a partir de entonces de sigue por un sendero.
Se llega a una primera cumbre de 1118 metros, desde donde se divisa la siguiente cima de la Penya de la Blasca.
Este es el Vértice Geodésico de La Blasca (1120 m.), donde también se llega en el transcurso de la ruta nº 10.
Tras la visita se inicia el regreso volviendo por el mismo sendero hasta enlazar con la pista forestal. Al llegar a la bifurcación termina la coincidencia con la ida, al seguir por la opción de la derecha.
Alcanzado un cruce se gira a la derecha, descendiendo por una pista encementada que baja por la ladera izquierda del Barranc de Sanxet.
Al otro lado, en la ladera de la derecha se alzan una serie de acantilados que forman las llamadas Penyes del Barranc de Sanxet.
En estas paredes es habitual la práctica de la escalada.
Ya casi llegando al cauce del barranco, empieza a la izquierda una pista forestal que se adentra en la magnífica Ombria de la Carbonera, siguiendo el cauce de otro barranco.
La pista forestal va ascendiendo rodeada de un impresionante bosque, pasa junto a los restos de un antiguo horno de cal y al coincidir con el cauce del barranco, termina. A partir de aquí empieza una subida bastante inclinada por un sendero que enlaza con otra pista forestal.
Una vez en ella, se inicia el definitivo descenso hasta el punto de partida.
Última imagen hacia el Barranc de Sanxet.
La pista forestal va descendiendo entre la extensa pinada, hasta que alcanza los bancales de olivos, ya muy cerca del coche aparcado.
Ruta de 14,28 Km realizada en 260' el 25/11/2014